Uñas

Manicura rusa

manicura rusa

La manicura rusa es una nueva técnica de belleza inspirada en la forma en que las mujeres rusas se cuidan y decoran las uñas.

Hoy en día es una de las manicuras más buscadas y exitosas. La diferencia más notable entre una manicura rusa y otra manicura que se realiza es que, en primer lugar, se presta mucha atención al tratamiento de la zona de la cutícula. Es decir, para hacer una manicura rusa se utiliza un torno, que empuja la cutícula hacia fuera para que nuestras manos estén en perfecto estado.

Dependiendo de las características de las uñas de cada persona, es posible que deba utilizar diferentes tipos de fresas. El objetivo de esta manicura es limpiar la zona entre la uña y la piel para que la uña luzca limpia y brillante.

La manicura rusa suele combinarse con otras técnicas de nail art y puede completarse con cualquier tipo de esmalte: convencional, en gel, semipermanente, con diseños nail art a mano alzada con base acrílica o con el uso de apliques y pedrería.

 

Cómo se lleva a cabo la manicura rusa

Lo primero que haremos es elegir una fresa para el torno. Existen muchos tipos diferentes de fresas para cutículas, algunas personas prefieren usar la de cono fina o de punta de bolita.

Con el empujador de cutículas comenzaremos a preparar la base de la uña levantado la cutícula sobrante. Con el torno a baja velocidad y con mucho cuidado limaremos suavemente el exceso de los bordes.

Limpiaremos toda la piel de los bordes de la uña así como cualquier exceso de células muertas que pueda haber alrededor o sobre la uñas natural con otra fresa especial.

Con un cepillo limpiaremos la zona y después limpiaremos con desinfectante.

El último paso de la manicura rusa es el esmaltado. En caso de las uñas de gel, acrílicas o de usar PolyGel prodeceremos al esculpido de las uñas con molde.

Si no vamos a construir uñas artificiales y preferimos el esmaltado permanente (o incluso esmaltado normal) lo primero es poner una base. Seguiremos con dos capas de esmalte y terminaremos con un top coat.

Para terminar, es muy importante que hidratemos muy bien las cutículas. Estas pueden resecarse con esta técnica y todo buen técnico de uñas sabe que el aceite de cutículas es su mejor aliado

 

Ventajas

Es mucho más precisa que la tradicional, en la que se ablanda y corta la cutícula con unos alicates. De hecho nunca recomendamos este tipo de manicura porque es muy probable que se produzcan heridas debido a una mala práctica.

El torno con la fresa adecuada simplemente lima suavemente la cutícula y deja un acabado limpio y perfecto ideal para preparar las uñas para pintar.

Cuanto mejor preparada esté la zona de la cutícula más duradera será nuestra manicura, bien sea con esmaltado tradicional, permanente o uñas esculpidas.

Por lo tanto, la fama de la manicura rusa viene del acabado impecable que proporciona la máxima durabilidad. Tus cutículas y uñas permanecen bonitas más tiempo y el producto se adhiere mejor a la uña natural.